Un pago domiciliado es un documento de pago no ejecutivo mediante el cual, el emisor del mismo comunica que realizará el pago de un importe fijado, a una fecha determinada, en nombre de un tercero. Al no ser un título ejecutivo las garantías para el beneficiario del mismo son mucho más reducidas que en otro tipo de documentos como el pagaré o la letra de cambio.
Al no ser documentos tipificados por normativa, tampoco son transmisibles mediante endoso, por lo que debe procederse a una cesión de crédito con notificación fehaciente al deudor.
El proveedor, por su parte, tendrá la posibilidad de anticipar el cobro de sus facturas, cediendo los créditos correspondientes a cambio de un descuento. Dicha cesión será sin recurso, es decir, no será responsable de los impagos de su cliente. El coste del anticipo será el acordado entre la empresa cliente y su entidad financiera.
Desde Savia Financiación queremos, con este tipo de procedimientos, agilizar la gestión de cobros de nuestros clientes de una forma eficaz, rápida y sencilla.